“Amoldar todo el Gobierno valenciano, o gran parte de él, a la reconstrucción”. Así deslizó el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, la dimensión de los cambios que prepara en su Ejecutivo con dos objetivos: trabajar en la recuperación de los pueblos arrasados por la dana con el fin de que superen el duelo por los 219 fallecidos y lograr recuperar la credibilidad que le permita su supervivencia política dentro del PP. El nuevo Gobierno contará con una gran vicepresidencia para la reconstrucción y una Consejería de Emergencias, tal como anunció el mismo presidente el viernes en el Parlamento autonómico. Los cambios incluyen el rediseño de todo el Consell, con más carteras, y un segundo escalón muy técnico, según fuentes del Gobierno. “Esto ya no es un reparto de cromos. Se juega mucho, se juega su vida política”, sostienen.
Susana Camarero rechazó ser la nueva vicepresidenta para la reconstrucción y solo aceptó ser la nueva portavoz, según fuentes del PP, que retrasan al martes el resto de nombramientos
“Amoldar todo el Gobierno valenciano, o gran parte de él, a la reconstrucción”. Así deslizó el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, la dimensión de los cambios que prepara en su Ejecutivo con dos objetivos: trabajar en la recuperación de los pueblos arrasados por la dana con el fin de que superen el duelo por los 219 fallecidos y lograr recuperar la credibilidad que le permita su supervivencia política dentro del PP. El nuevo Gobierno contará con una gran vicepresidencia para la reconstrucción y una Consejería de Emergencias, tal como anunció el mismo presidente el viernes en el Parlamento autonómico. Los cambios incluyen el rediseño de todo el Consell, con más carteras, y un segundo escalón muy técnico, según fuentes del Gobierno. “Esto ya no es un reparto de cromos. Se juega mucho, se juega su vida política”, sostienen.
Carlos Mazón no tenía previsto afrontar una crisis de gobierno ahora, cuando la emergencia aún está activa. Optaba por utilizar a la vicepresidenta y consejera de Servicios Sociales, Susana Camarero, como portavoz para aplacar las acusaciones de no dar la cara y mantener a la directora general de Prevención de Incendios Forestales, Rosa Tourís, de perfil técnico, en la parte menos política. Según fuentes del PP, hacer cambios para apartar a una parte de los responsables de la nefasta gestión de la catástrofe sería tanto como reconocer unos errores de los que él mismo ha sido coautor. De hecho, Mazón no presenta los cambios como una consecuencia a una mala gestión, la asunción de errores o a la necesidad de apartar del cargo a determinadas personas. Solo lo muestra como una maniobra necesaria tras el paso de la dana.
La frágil situación del presidente valenciano y la mala imagen del partido, con discrepancias públicas sobre los presuntos culpables y sobre la fórmula de afrontar el tiempo de la posdana, obligó al jefe de los populares, Alberto Núñez Feijóo, a tomar cartas en el asunto. Mazón se revolvió en un principio, según las mismas fuentes, pero acabó claudicando y aceptando hacer cambios en su Gobierno e, incluso, fiar su futuro al funcionamiento de ese nuevo Ejecutivo.
Cambiar la cara del Gobierno
Con la reputación dañada, el jefe de la Generalitat cambiará la cara del Gobierno. La ex de Ciudadanos Ruth Merino se hacía cargo de la portavocía, que pasará a manos de la hasta ahora única vicepresidenta, Susana Camarero, que durante los últimos días ya ha ejercido ese papel. Según fuentes del partido, Camarero, mano derecha y de la absoluta confianza de Mazón, no ha aceptado hacerse cargo de la vicepresidencia para la reconstrucción social y económica que, según dijo el presidente en las Cortes, “será el corazón de nuestra estrategia de recuperación”. El objetivo de esta macrocartera será coordinar la recuperación de una manera transversal, tratando desde la gestión de los fondos europeos hasta el impulso del empleo, el apoyo a pequeñas y medianas empresas o la promoción de la innovación. Quien la ocupe dirigirá la Comisión Interdepartamental de Recuperación Económica y Social en la que estarán todos los consejeros de la Generalitat Valenciana “para llevar a cabo una acción coordinada, integral y coherente para la recuperación de lo que la riada ha destruido”, tal como dijo Mazón.
El president no acudió el sábado a la reunión del Cecopi. Se conectó de forma telemática, aunque Presidencia de la Generalitat no ha querido desvelar el lugar desde el que lo hizo. Fuentes del Gobierno mantienen que ha estado trabajando todo el fin de semana, sobre todo, en la nueva estructura del Ejecutivo, con un reparto de carteras más troceado y el baile de materias, de manera que algunas de las que hasta ahora pertenecían a una consejería serán asignadas a otra. Puede ser el caso de Empleo (ahora incluida en Educación y Cultura) y Vivienda (que es competencia de la vicepresidencia de Servicios Sociales).
“Necesita un segundo escalón técnico potente para convencer de que puede hacerlo”, señalan. Las mismas fuentes no descartan que se eche mano de altos funcionarios que accedan a formar parte de esta reconstrucción. En cualquier caso, y pese a que tenía previsto anunciar los cambios este lunes, según diversas fuentes, no será hasta el martes cuando realice el anuncio del grueso de las decisiones.
El nuevo Gobierno tendrá una consejería monográfica de Emergencias e Interior dirigida, fundamentalmente, a la prevención y “anticipación ante cualquier amenaza”, según dijo Mazón. “Vamos a garantizar que los servicios de emergencias tengan un punto de coordinación central para analizar riesgos, coordinar simulacros y diseñar protocolos de actuación que protejan vidas y minimicen los daños”, añadió. Mazón quiere diseñar un Consell volcado en la recuperación, pero tampoco se puede olvidar de que en la Comunidad Valenciana hay más territorio que, aunque solidario con la provincia de Valencia, tiene problemas y necesita recursos para los tres próximos años.
Entre los nombres que saldrán del Gobierno aparecen el de la consejera encargada de Emergencias, Salomé Pradas, que afirmó desconocer el sistema de envío de alertas masivas a los móviles hasta el mismo día de la dana, pese a que es una tecnología que se presentó en 2022. Además de ella, el nuevo responsable de la cartera dejará caer, con toda probabilidad, al secretario autonómico, el ex de Ciudadanos Emilio Argüeso. También está en la casilla de salida la consejera de Industria, Nuria Montes, por el trato dado a las familias de las víctimas y la escasa empatía con estas. En las de entrada, las quinielas señalan a la capitana de la Guardia Civil, Rosa Touris, a la que devolvería el haber dado la cara en nombre del Gobierno Valenciano tras cada reunión del Cecopi. También apuntan al diputado del PP por Alicante Joaquín Melgarejo por su conocimiento en materia hídrica.
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