Las redadas se producen días después de protestas multitudinarias por la destitución de varios alcaldes de partidos prokurdos. Leer Las redadas se producen días después de protestas multitudinarias por la destitución de varios alcaldes de partidos prokurdos. Leer
Al menos 231 personas han sido detenidas en varias ciudades de Turquía, entre ellas periodistas, políticos, sindicalistas y activistas de ONG, en una investigación policial por supuestos vínculos con la guerrilla kurda PKK, considerada una organización terrorista por Ankara y la UE. Las redadas en domicilios se produjeron a primera hora de la mañana en la ciudad de Estambul y Ankara, así como en localidades de mayoría kurda como Diyarbakir, Batman o Mardin.
Entre los detenidos se encuentran ocho periodistas de medios opositores al gobierno, así como el traductor y director de cine Ardin Diren, el escritor Hizri Izgören o el coordinador editorial Baver Yoldas. El alcalde de un distrito de la ciudad de Diyarbakir, Cengiz Dündar, también fue detenido, junto a decenas de profesores del sindicato de trabajadores de educación y ciencia (Egitim-Sen), representantes del sindicato DISK y miembros de una ONG de periodistas. Medios locales revelaron que al menos cinco miembros de una misma familia fueron detenidos por participar en protestas contra la destitución de alcaldes kurdos en el sureste del país.
La acusación se basa en declaraciones de testimonios secretos e incluyen crímenes por «pertenencia», «propaganda» y «participación en la estructura política y mediática» de organizaciones terroristas, en alusión al grupo kurdo PKK. «(Los sospechosos) han hecho propaganda de la organización terrorista PKK a través de sus redes sociales, han participado en acciones callejeras ilegales, dañando la propiedad pública», declaró en un comunicado el ministro del Interior, Ali Yerlikaya.
A los detenidos no se les ha dado acceso a un abogado ni tampoco se les ha informado sobre el motivo de su arresto, según denunciaron asociaciones de letrados. «Se nos niegan nuestros derechos más básicos. Los periodistas están siendo detenidos ilegalmente. No lo aceptemos, nos están persiguiendo», denunció en un comunicado el sindicato de periodistas de Turquía (TGS).
Las detenciones se producen días después de protestas multitudinarias en varias ciudades de Turquía por la destitución de siete alcaldes -en su mayoría del partido prokurdo DEM- por supuestos vínculos terroristas. Las fuerzas de seguridad prohibieron las protestas y detuvieron a más de trescientos manifestantes en todo el país. Otros 37 ayuntamientos están siendo investigados, por lo que se esperan nuevas destituciones en los próximos días. En la última década el gobierno ha intervenido 147 ayuntamientos, casi todos en manos de partidos prokurdos.
Esta creciente presión contra la oposición se produce en un momento de gran tensión política, en el que el gobierno de Recep Tayyip Erdogan y su aliado parlamentario, el ultraderechista MHP, han dado señales de querer reanudar negociaciones con el PKK para iniciar un nuevo proceso de paz.
El líder del MHP, Devlet Bahçeli, invitó al parlamento al líder del PKK, Abdullah Öcalan -encarcelado desde hace un cuarto de siglo- para disolver la guerrilla y que dejaran las armas. Öcalan declaró que el acercamiento podría «llevar el proceso de la violencia a la política». Sin embargo, persiste la incertidumbre sobre el nivel de autoridad que Öcalan todavía ejerce sobre la organización. Días después de que el gobierno diera señales de unas posibles conversaciones de paz, el PKK llevó a cabo un atentado contra una empresa de defensa en Ankara, causando cinco muertos.
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