El Barça de baloncesto también recurre desesperado a la Masía

El Barcelona no ve la luz al final del túnel, incapaz de reaccionar pese a que cada semana que pasa tiene más cerca una colisión que se prevé antológica. Las picas están en las murallas del castillo azulgrana desde hace meses, a la espera de ver cómo las cabezas de los teóricos culpables son clavadas en sus afiladas puntas. Salvo sorpresa mayúscula, una de las primeras irá para Joan Peñarroya . El técnico ya estuvo a punto de ser despedido en enero, cuando sus pupilos rozaron la primera ausencia del club en la Copa del Rey en los últimos 58 años. Se esquivó la bala aunque, tras caer a las primeras de cambio contra el Tenerife y cuajar desde entonces dos derrotas en cuatro partidos, el panorama para el catalán se ha vuelto de nuevo claustrofóbico. Hoy, ante el Partizan de Belgrado ( 20.45, Movistar Plus ), se le examinará con lupa. Cada partido puede ser el último. Es cierto que Peñarroya no es el culpable de todos los males del Barça, que ha sufrido una plaga de lesiones de difícil gestión. De momento, por la enfermería han pasado Laprovittola, Metu, Vesely, Punter y, por último, Juan Núñez . El base, después de lesionarse en el menisco de su rodilla derecha hace un par de semanas, se ha sometido a una operación que le obligará a perderse todo lo que resta de campaña, incluido el Eurobasket con la selección en verano. Una dolorosa lista que la dirección deportiva, en un principio, intentó paliar con la contratación de Raul Neto , pese a que el brasileño vio rescindido su contrato después de solo poder disputar ocho minutos en un mes, perseguido también por los problemas físicos. Más tarde, se ridiculizó en un aeropuerto a Thomas Heurtel , un culebrón que los máximos responsables de la parcela deportiva, Josep Cubells y Juan Carlos Navarro, decidieron zanjar cortando el grifo, negándole al técnico los refuerzos por los que tanto ha suplicado en rueda de prensa. Es por eso que el ex del San Pablo Burgos y del Baskonia, para rellenar su maltrecha rotación, ha tirado de la cantera, de La Masía, inagotable fuente de talento en el fútbol, que no es tanto en el baloncesto, donde solo se han forjado grandes talentos en los últimos años como el propio Navarro, el ahora madridista Mario Hezonja o el fenómeno Mohamed Dabone , de solo 13 años pero con 2,10 metros de estatura. Por lo tanto, hasta la fecha, son tres los jugadores del filial los que hacen vida profesional con la primera plantilla: el pívot maliense Sayon Keita (17 años, 2,12 metros), el base español Raúl Villar (17, 1,90) y el alero Dame Sarr (18, 1,98). Mientras que el primero ha tenido una participación testimonial, el segundo se ha convertido en el primer jugador de la historia del equipo en participar en todas las categorías. Pero es sin duda Sarr el que más huella ha dejado de su talento.Noticia Relacionada baloncesto estandar Si Audi Crooks, la gigante de 1,90 y más de 100 kilos que incluso machaca al odio en internet Pablo Lodeiro La jugadora se ha convertido en un fenómeno universitario por promediar 23 puntos con Iowa State y por su carácter pacíficoEl italiano con sangre senegalesa, poderoso físico y valiente desde la línea de tres, también proyecto de gran defensor, ya se había ganado un puesto en el grupo desde el comienzo de la temporada, aunque eclosionó de manera definitiva ante el Breogán el pasado día dos. Fue el máximo anotador del encuentro, 21 puntos, para, pocos días después, ser de los pocos que dieron la cara en una nueva derrota ante el Tenerife, autor el transalpino de 10 tantos en solo 17 minutos. Actuaciones y talento por pulir que incluso han llamado la atención de Kevin Punter , máximo anotador del conjunto. «Dejadme un verano con él y veréis», llegó a decir el estadounidense sobre Sarr, con quien comparte una relación casi paternofilial. El de Oderzo, además crecer 20 centímetros en solo un año y mantener un gran apego por su herencia africana (con el senegalés Fall habla en el vestuario wólof , idioma del país que comparten sus ancestros), ya ha protagonizado una densa polémica. En enero estuvo a punto de fichar por el Trapani Sharks y, siempre según el club italiano, cuando todo estaba firmado, el Barça se echó atrás como un «mentiroso», como aseguró su presidente Valerio Antonini. Único borrón de una de las pocas noticias positivas del Barça en su desastrosa temporada. El Barcelona no ve la luz al final del túnel, incapaz de reaccionar pese a que cada semana que pasa tiene más cerca una colisión que se prevé antológica. Las picas están en las murallas del castillo azulgrana desde hace meses, a la espera de ver cómo las cabezas de los teóricos culpables son clavadas en sus afiladas puntas. Salvo sorpresa mayúscula, una de las primeras irá para Joan Peñarroya . El técnico ya estuvo a punto de ser despedido en enero, cuando sus pupilos rozaron la primera ausencia del club en la Copa del Rey en los últimos 58 años. Se esquivó la bala aunque, tras caer a las primeras de cambio contra el Tenerife y cuajar desde entonces dos derrotas en cuatro partidos, el panorama para el catalán se ha vuelto de nuevo claustrofóbico. Hoy, ante el Partizan de Belgrado ( 20.45, Movistar Plus ), se le examinará con lupa. Cada partido puede ser el último. Es cierto que Peñarroya no es el culpable de todos los males del Barça, que ha sufrido una plaga de lesiones de difícil gestión. De momento, por la enfermería han pasado Laprovittola, Metu, Vesely, Punter y, por último, Juan Núñez . El base, después de lesionarse en el menisco de su rodilla derecha hace un par de semanas, se ha sometido a una operación que le obligará a perderse todo lo que resta de campaña, incluido el Eurobasket con la selección en verano. Una dolorosa lista que la dirección deportiva, en un principio, intentó paliar con la contratación de Raul Neto , pese a que el brasileño vio rescindido su contrato después de solo poder disputar ocho minutos en un mes, perseguido también por los problemas físicos. Más tarde, se ridiculizó en un aeropuerto a Thomas Heurtel , un culebrón que los máximos responsables de la parcela deportiva, Josep Cubells y Juan Carlos Navarro, decidieron zanjar cortando el grifo, negándole al técnico los refuerzos por los que tanto ha suplicado en rueda de prensa. Es por eso que el ex del San Pablo Burgos y del Baskonia, para rellenar su maltrecha rotación, ha tirado de la cantera, de La Masía, inagotable fuente de talento en el fútbol, que no es tanto en el baloncesto, donde solo se han forjado grandes talentos en los últimos años como el propio Navarro, el ahora madridista Mario Hezonja o el fenómeno Mohamed Dabone , de solo 13 años pero con 2,10 metros de estatura. Por lo tanto, hasta la fecha, son tres los jugadores del filial los que hacen vida profesional con la primera plantilla: el pívot maliense Sayon Keita (17 años, 2,12 metros), el base español Raúl Villar (17, 1,90) y el alero Dame Sarr (18, 1,98). Mientras que el primero ha tenido una participación testimonial, el segundo se ha convertido en el primer jugador de la historia del equipo en participar en todas las categorías. Pero es sin duda Sarr el que más huella ha dejado de su talento.Noticia Relacionada baloncesto estandar Si Audi Crooks, la gigante de 1,90 y más de 100 kilos que incluso machaca al odio en internet Pablo Lodeiro La jugadora se ha convertido en un fenómeno universitario por promediar 23 puntos con Iowa State y por su carácter pacíficoEl italiano con sangre senegalesa, poderoso físico y valiente desde la línea de tres, también proyecto de gran defensor, ya se había ganado un puesto en el grupo desde el comienzo de la temporada, aunque eclosionó de manera definitiva ante el Breogán el pasado día dos. Fue el máximo anotador del encuentro, 21 puntos, para, pocos días después, ser de los pocos que dieron la cara en una nueva derrota ante el Tenerife, autor el transalpino de 10 tantos en solo 17 minutos. Actuaciones y talento por pulir que incluso han llamado la atención de Kevin Punter , máximo anotador del conjunto. «Dejadme un verano con él y veréis», llegó a decir el estadounidense sobre Sarr, con quien comparte una relación casi paternofilial. El de Oderzo, además crecer 20 centímetros en solo un año y mantener un gran apego por su herencia africana (con el senegalés Fall habla en el vestuario wólof , idioma del país que comparten sus ancestros), ya ha protagonizado una densa polémica. En enero estuvo a punto de fichar por el Trapani Sharks y, siempre según el club italiano, cuando todo estaba firmado, el Barça se echó atrás como un «mentiroso», como aseguró su presidente Valerio Antonini. Único borrón de una de las pocas noticias positivas del Barça en su desastrosa temporada.  

El Barcelona no ve la luz al final del túnel, incapaz de reaccionar pese a que cada semana que pasa tiene más cerca una colisión que se prevé antológica. Las picas están en las murallas del castillo azulgrana desde hace meses, a la espera … de ver cómo las cabezas de los teóricos culpables son clavadas en sus afiladas puntas. Salvo sorpresa mayúscula, una de las primeras irá para Joan Peñarroya. El técnico ya estuvo a punto de ser despedido en enero, cuando sus pupilos rozaron la primera ausencia del club en la Copa del Rey en los últimos 58 años. Se esquivó la bala aunque, tras caer a las primeras de cambio contra el Tenerife y cuajar desde entonces dos derrotas en cuatro partidos, el panorama para el catalán se ha vuelto de nuevo claustrofóbico. Hoy, ante el Partizan de Belgrado (20.45, Movistar Plus), se le examinará con lupa. Cada partido puede ser el último.

Es cierto que Peñarroya no es el culpable de todos los males del Barça, que ha sufrido una plaga de lesiones de difícil gestión. De momento, por la enfermería han pasado Laprovittola, Metu, Vesely, Punter y, por último, Juan Núñez. El base, después de lesionarse en el menisco de su rodilla derecha hace un par de semanas, se ha sometido a una operación que le obligará a perderse todo lo que resta de campaña, incluido el Eurobasket con la selección en verano. Una dolorosa lista que la dirección deportiva, en un principio, intentó paliar con la contratación de Raul Neto, pese a que el brasileño vio rescindido su contrato después de solo poder disputar ocho minutos en un mes, perseguido también por los problemas físicos. Más tarde, se ridiculizó en un aeropuerto a Thomas Heurtel, un culebrón que los máximos responsables de la parcela deportiva, Josep Cubells y Juan Carlos Navarro, decidieron zanjar cortando el grifo, negándole al técnico los refuerzos por los que tanto ha suplicado en rueda de prensa.

Es por eso que el ex del San Pablo Burgos y del Baskonia, para rellenar su maltrecha rotación, ha tirado de la cantera, de La Masía, inagotable fuente de talento en el fútbol, que no es tanto en el baloncesto, donde solo se han forjado grandes talentos en los últimos años como el propio Navarro, el ahora madridista Mario Hezonja o el fenómeno Mohamed Dabone, de solo 13 años pero con 2,10 metros de estatura. Por lo tanto, hasta la fecha, son tres los jugadores del filial los que hacen vida profesional con la primera plantilla: el pívot maliense Sayon Keita (17 años, 2,12 metros), el base español Raúl Villar (17, 1,90) y el alero Dame Sarr (18, 1,98). Mientras que el primero ha tenido una participación testimonial, el segundo se ha convertido en el primer jugador de la historia del equipo en participar en todas las categorías. Pero es sin duda Sarr el que más huella ha dejado de su talento.

 RSS de noticias de deportes