El inicio de las emisiones de La 2 Cat es una excelente noticia. Por el catalán, porque aumenta la oferta en este idioma y, esperémoslo, porque aumenta su audiencia. Y es que la existencia de este nuevo canal no tiene que implicar puramente una redistribución de la audiencia existente, sino que la ha de hacer crecer. Hay que darle tiempo. De momento, ayer hizo un 3,9% de share. Y también es una buena noticia para el audiovisual. Puede dinamizar el sector si los encargos son pulidos y sensatos.
El inicio de las emisiones de la nueva cadena catalán es una excelente noticia porque aumenta la oferta en este idioma, aumenta su audiencia y beneficia el sector audiovisual
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El inicio de las emisiones de la nueva cadena catalán es una excelente noticia porque aumenta la oferta en este idioma, aumenta su audiencia y beneficia el sector audiovisual


El inicio de las emisiones de La 2 Cat es una excelente noticia. Por el catalán, porque aumenta la oferta en este idioma y, esperémoslo, porque aumenta su audiencia. Y es que la existencia de este nuevo canal no tiene que implicar puramente una redistribución de la audiencia existente, sino que la ha de hacer crecer. Hay que darle tiempo. De momento, ayer hizo un 3,9% de share. Y también es una buena noticia para el audiovisual. Puede dinamizar el sector si los encargos son pulidos y sensatos.
A las 7.50 horas de ayer cortaron el informativo que emitía La 2 y Gemma Nierga comenzó su Cafè d’idees con una breve mención al especial significado del día, pero sin más ceremonial. Eso sí, en la mayoría de programas se recordó el nacimiento de La 2 Cat. La parrilla irá rellenándose de novedades los próximos días. Este martes hay varios estrenos. En la jornada inaugural fue notable, y un poco fatigante, el porcentaje de tertulias. También hubo reposiciones.
Admira que Sant Cugat trabaje con el exiguo presupuesto de que dispone, ridículo comparado con el dispendio mal aprovechado de TV3. Los informativos hicieron su papel, con un breve pero clarísimo análisis de los últimos movimientos diplomáticos en Gaza en la edición de Vespre, a cargo del profesor Javier Albarracín. El noticiario de Rubén Urdiales tiene un temario corto, pero bien tratado.
En Cocina brutal, el chef valenciano Roberto Bosquet, que se explica bien, no solo enseña recetas. También, según la publicidad del programa, un estilo de vida. Si entre TV3 y TVE la sangre no ha llegado al río con la onomástica corporativa (2 Cat, 3Cat), no sé qué dirá Marc Ribas del título de este programa donde resuena un adjetivo muy frecuentado por el cocinero de TV3. Bosquet sacó un libro el 2021 con el subtítulo “Mis recetas más brutales”. Brutal, de Marc Ribas se editó el 2018.
Una de las garantías de este proyecto es que no ha sido un invento imaginado desde cero. Sant Cugat hace tiempo que propone televisión en catalán —sí que es verdad que muchas veces en dosis homeopáticas— y hereda una cultura profesional que comenzaron en los 70 en Miramar una generación, innovadora y valiente, del periodismo televisivo, la realización o la gestión (Antoni Serra, Mercè Vilaret, Juan Manuel Martín de Blas, Montserrat Roig, Joan Anton Benach, Àngel Casas, Joaquim Maria Puyal…).
Este lunes, en el primer día, tanto los veteranos como los que encaraban un nuevo encargo se veían tocados por la ilusión. Es fácil profetizar que el proyecto tendrá sus polémicas. La primera, este martes, particularmente artificiosa. La 2 Cat ofrecerá el partido de la selección española y la búlgara. Hay en el gallinero de las redes sociales un montón de mensajes de personal preguntándose por qué se da en catalán una cosa que los indepes no mirarán y defienden que para hablar de España se tiene que hacer en español. Una estrechez política y una indigencia intelectual que ya conocemos. Y también se encuentran réplicas de los que consideran que usar el catalán en el seguimiento de La Roja es una maniobra del españolismo que emplea el catalán para agrandar el alcance de sus mensajes. Esto es querer encoger el idioma y los medios catalanes para que solo sirvan a un perjudicado y concreto imaginario nacionalista. Que La Roja también interesa a un sector importante de la audiencia catalana lo demuestran las cifras del partido entre España y Georgia del sábado. La retransmisión hizo a La 1 líder en Cataluña con 475.000 espectadores (28,2%). Un tanto por ciento que sube veinte puntos entre los espectadores más jóvenes. ¿Por qué habría de renunciar La 2 Cat?
En fin, ya iremos hablando. Bienvenida.
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Sobre la firma

Licenciado en Derecho y Periodismo, fue profesor de Historia del Cine en la UAB durante varios años. Trabajó en las redacciones de Fotogramas, Tele/Expres, El Periódico y, durante más de treinta años, en EL PAÍS donde, como subdirector, participó en la fundación de Babelia y Ciberpaís. Fue Defensor del Lector.
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