«En lugar de disuadir a Putin, él está disuadiendo más a Occidente», dice esta académica Leer «En lugar de disuadir a Putin, él está disuadiendo más a Occidente», dice esta académica Leer
Vladimir Putin anunció cambios importantes en la doctrina de disuasión nuclear ya el pasado mes de septiembre ante las intenciones declaradas de Ucrania de atacar territorio ruso con armamento occidental. Moscú decidió aumentar el número de escenarios en los que el país se reserva el derecho a utilizar armas nucleares. La agresión por parte de un Estado no nuclear -como Ucrania- con el apoyo de un Estado nuclear -como Estados Unidos- se considerará un ataque conjunto contra la Federación de Rusia. También los ataques masivos con drones.
La académica ucraniana Polina Sinovets es la directora del Centro de No Proliferación de Odesa (OdCNP). Cree que Ucrania y Occidente deberían pactar qué objetivos se puede atacar con misiles dentro de territorio ruso.
- Dos años y medio después de iniciar la invasión a gran escala de Ucrania, Putin decidió endurecer su doctrina nuclear. ¿Cuál fue el objetivo de ese movimiento?
- Contener y disuadir a Occidente. [Quería] evitar que den permiso a Ucrania para atacar en suelo ruso con armamento Occidental.
- ¿Estuvo relacionado ese ‘anuncio nuclear’ con la incursión ucraniana en Kursk?
- En la doctrina nuclear se mencionaba la integridad del territorio ruso. Pero Ucrania cruzó la frontera y no pasa nada. Putin está redibujando las líneas rojas. También [el aviso sobre nueva doctrina nuclear] incluye declaraciones sobre el uso de drones, pero Ucrania ya está atacando así todos los días. La cuestión es cómo de masivo sea el ataque.
- ¿Cuál debería ser la posición de Occidente ante estas amenazas?
- No deberían reaccionar. Porque así es como Putin se siente poderoso con sus señales nucleares.
- ¿Cuál cree que es el principal error que cometemos en Europa Occidental cuando tratamos de entender lo que Putin está haciendo, lo que Putin quiere y lo que Putin realmente puede hacer?
- Deberíamos ver a Putin como una persona muy racional, que está haciendo todo lo posible para maximizar sus beneficios y evitar cualquier daño adicional. Si nos fijamos en su biografía, nunca ha atacado a un enemigo más fuerte o incluso a un adversario igual. Primero Chechenia, después Georgia… y luego la anexión de Crimea, que fue absolutamente incruenta con consecuencias mínimas para Rusia. Putin concibió la guerra contra Ucrania como una operación especial y se basó en informes del [servicio de seguridad] FSB de que Ucrania es débil y prorrusa, y que se necesitarían tres semanas como máximo para tomarla.
- Y entre todas esas cosas, hemos aprendido a tenerle miedo.
- El principal error de Occidente es pensar que Putin es una bestia, que puede escalar debido al mal humor que tenga un día, lo cual no es la verdad. Putin quiere sacar todo lo posible de esta guerra. Y, por supuesto, quiere tomar la mayor cantidad de territorio de Ucrania, transformando la otra parte del país en un estado títere como Bielorrusia, y así poner su retrato en la pared como si fuera Pedro el Grande.
- ¿Y qué precio está dispuesto a pagar?
- Lo que realmente no quiere es iniciar una escalada nuclear, ver a Rusia en ruinas, ver su régimen socavado. Porque su escalada nuclear significaría no sólo la posibilidad de iniciar una guerra convencional con las consecuencias de una escalada atómica, sino también con sanciones de India, China… naciones que son críticas con las armas nucleares como herramienta de objetivos geopolíticos. Todo puede suceder, pero sólo si las alternativas a eso son peores que el uso de armas nucleares: si existe amenaza inminente de su destrucción personal.
- Los países occidentales son muy cautelosos. Realmente temen la escalada. ¿Cómo reaccionará Rusia a un ataque con armas occidentales en las profundidades del país?
- Depende de lo que Ucrania ataque. Si es Moscú o San Petersburgo, puede haber consecuencias. Rusia podría comenzar a probar armas nucleares. Así que, al tiempo que se proporciona a Ucrania objetivos de ataque profundos, creo que debería haber una especie de acuerdos entre Ucrania y las potencias occidentales que lo proporcionan. Los ucranianos no siempre son sabios a la hora de apuntar. No digo que no se pueda apuntar a más de 300 kilómetros, sino que discutamos qué cosas es mejor no tocar: como los radares de alerta temprana, a los que Ucrania apunta y a veces no es bueno hacer esto porque son responsables de la disuasión estratégica. En cambio, atacar aeródromos es razonable.
- Pero dicen que Rusia ya ha trasladado gran parte de los aviones muy lejos.
- Sí. Aunque no cambie las reglas del juego, es una señal para Rusia de que Occidente está con Ucrania.
- ¿Estamos disuadiendo a Putin o él nos está disuadiendo a nosotros?
- Por supuesto que Putin está disuadiendo a Occidente. ¿Lo estamos disuadiendo a él? Sí y no. En 2022, todo el mundo empezó a pensar que había una mayor probabilidad de que Rusia usara armas nucleares contra Ucrania porque, en vísperas de la contraofensiva ucraniana, existía el riesgo de que los rusos fueran rodeados por ucranianos en algún lugar del sur. Y luego la Administración Biden hizo llegar a Putin un mensaje por un canal privado: si tocas a Ucrania con armas nucleares, entonces habrá una especie de ataque convencional colectivo de Estados Unidos, Reino Unido y Francia contra las fuerzas rusas en Ucrania y tal vez en el mar Negro. Tras este aviso, Putin salió diciendo que nunca habían planeado usar armas nucleares contra Ucrania. Y dejó de hablar de escalada nuclear durante todo el año, hasta que Macron empezó a jugar con la ambigüedad estratégica, diciendo que no estaba excluyendo el envío de tropas. Putin es realmente muy sensible a la amenaza de una escalada convencional, pero sabe que hay una sombra nuclear muy fuerte detrás. Es por eso que se detiene ahí. Se nota que es cauteloso; está muy atento a las señales del oeste. Es por eso que puede ser disuadido. Pero Occidente se ve disuadido por algo que él cuenta todos los días. Así que Occidente está mucho más disuadido que Rusia.
- Las líneas rojas rusas, ¿existen?
- Nunca hay una línea roja clara. Dan una pista, y luego las fantasías de Occidente transforman esta pista en una línea roja. Probablemente hay algunas líneas rojas: el colapso del frente, la derrota completa de Rusia, algo así. Pero no por enviar armas, sino por algo que amenace la supervivencia de Rusia como estado viable y poderoso.
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