No será raro que la nueva serie que prepara Atresplayer vaya acompañada de palabras como delirante, surrealista o alocada. Rafaela y su loco mundo es una comedia creada por Aníbal Gómez y dirigida por Ernesto Sevilla cuyo rodaje empezará el 1 de abril. En sus ocho capítulos de 25 minutos contará la vida de Rafaela, una adolescente interpretada por Ingrid García-Jonsson. Por su argumento, podríamos estar ante una serie más dirigida al público juvenil: Rafaela vive con su madre, ama de casa, su padre, inventor, y su abuela. Junto a sus amigas Corpus, Chelo y Debo, y su caniche, navegarán por diferentes peligros para salvar el mundo antes de que se les acabe la adolescencia.
Atresplayer pone en marcha una comedia surrealista creada por Aníbal Gómez y dirigida por Ernesto Sevilla. Ingrid García-Jonsson interpreta a la niña protagonista, con Carlos Areces y Joaquín Reyes en el reparto
No será raro que la nueva serie que prepara Atresplayer vaya acompañada de palabras como delirante, surrealista o alocada. Rafaela y su loco mundo es una comedia creada por Aníbal Gómez y dirigida por Ernesto Sevilla cuyo rodaje empezará el 1 de abril. En sus ocho capítulos de 25 minutos contará la vida de Rafaela, una adolescente interpretada por Ingrid García-Jonsson. Por su argumento, podríamos estar ante una serie más dirigida al público juvenil: Rafaela vive con su madre, ama de casa, su padre, inventor, y su abuela. Junto a sus amigas Corpus, Chelo y Debo, y su caniche, navegarán por diferentes peligros para salvar el mundo antes de que se les acabe la adolescencia.
Las tres amigas de Rafaela, y aquí viene el giro, están interpretadas por Aníbal Gómez (Corpus, la guapa superficial del grupo), Carlos Areces (Chelo, la chivata e ingenua) y Joaquín Reyes (Debo, la más lista de la clase, estoica y belieber). Porque Rafaela y su loco mundo no tendrá nada de corriente. Al fin y al cabo, detrás de esta ficción están el espíritu de Muchachada Nui y del grupo Ojete Calor, cuya música acompañará las andanzas de sus protagonistas.
La serie tiene como punto de partida una adaptación libre del cuentoEl alucinante mundo de Rafaella Mozzarella, escrito por Aníbal Gómez, ilustrado por Jaime Villanueva y publicado por Fun Readers en 2019. El propio autor se ha encargado de adaptar la historia y firma los ocho guiones, que apostarán por el humor absurdo, irónico y una estructura sencilla y autoconclusiva. “Es una comedia de aventuras que sirve de homenaje al cine y al humor que me han marcado de por vida”, cuenta Aníbal Gómez a EL PAÍS. “Quería huir del hiperrealismo tan en boga de las series actuales. Tenía que ser una píldora de pura diversión. Vivir la emoción de darle al play y meterte dentro de un mundo especial. De encontrarte con unos personajes que podrían ser unos parientes manchegos de Pipi Calzaslargas viviendo dentro de unos decorados de color que emularan la dorada época artesanal de Hollywood”, añade.

INMA FLORES (EL PAIS)
El creador ha dado mucha importancia a la vertiente estética de su serie, producida por Atresmedia en colaboración con Estela Films. “Aun sabiendo que los colores y la plasticidad no serían naturalistas, tenían que invitar al espectador a querer estar ahí dentro, por lo acogedores que resultarían. Es como cuando visitas un parque temático o ves los decorados de Barrio Sésamo. ¿Sabes cuando de repente hueles algo que te transporta a la infancia? Pues aquí quiero que sea igual, solo que al llegar a ese mundo de nostalgia, sientas que te he engañado y que estás en un lugar totalmente nuevo que nunca antes habías visto”, relata.
Aníbal Gómez quería plasmar su fascinación el “atormentado e intenso mundo de las adolescentes”, aprovechar sus estereotipos para detonarlos y, al mismo tiempo, llevar su propio mundo, lleno de referencias del cine de aventuras y misterio, hacia un tono accesible y con tramas clásicas y fáciles de seguir. “Allá por 2005, cuando Carlos Areces y yo nos subimos por primera vez a un escenario con el nombre de Ojete Calor, nos calzamos dos pelucas, y salimos interpretando a unas adolescentes sin ser nada de eso nosotros. Llevábamos unas revistas muy teenager y estábamos fascinadas por unos reportajes de Estopa y de Harry Potter. Años después, Carlos creó unos personajes divertidísimos llamados Tontili, Monguili y Gilipich, interpretados por nosotros, es decir, mamarrachos adultos. Se hicieron un par de sketches, pero supo a poco. La gente quería más. Aquí vi la ocasión estupenda para recuperarlos en el espíritu y en la forma de las amigas de la protagonista del libro”.
El humor absurdo de José Luis Cuerda, los Monty Python y Muchachada Nui son algunos de los referentes principales que Gómez cita para su serie, a los que añade una retahíla que incluye al cómico australiano Chris Lilley, los decorados de El mago de Oz, la anarquía y el color de Pippi Langstrump, el mundo de la Warner, los cuentos de los hermanos Grimm, el misterio y terror palomitero de Scooby Doo, el barroquismo lúgubre de La familia Addams, las aventuras de las películas de Steven Spielberg o los viajes en el tiempo.
Para los orígenes de la serie hay que remontarse a la presentación del cuento El alucinante mundo de Rafaella Mozzarella. Allí, Arturo Valls animó a Aníbal Gómez a convertir esa historia en serie. “Meses después le mandé un capítulo piloto y me olvidé. Mi sorpresa vino cuando, además de Arturo, Jorge Pezzi, Félix Tusell y Carmela Martínez creyeron en el proyecto y se embarcaron como productores sin pensárselo, y la plataforma compró la propuesta”. El riesgo y lo inusual del proyecto fue lo que hizo que Atresmedia diera luz verde a la idea. “Tiene un estilo de comedia muy distinto que no hemos visto antes en la ficción española. Se trata de una serie de aventuras repleta de situaciones alocadas y surrealistas que rompe una lanza a favor de la diversión pura”, dice Montse García, directora de ficción de Atresmedia. “Reúne muchas de las claves que buscamos en nuestras ficciones, como la innovación, las nuevas narrativas, los personajes intergeneracionales o los formatos transgresores”, concluye.
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